Aprendiendo a aprender

Aprendiendo a aprender

Acabamos de invertir tiempo y energía pensando en el conocimiento explorando preguntas como, ¿qué sé? ¿Cómo sé lo que sé? ¿Es cierto lo que sé? ¿Se alinea mi conocimiento con el sentido común? ¿Es mi conocimiento aplicable en mi vida cotidiana?

Explorar estas preguntas a diario puede ayudarnos a reconocer que nuestro conocimiento no es estático. ¡Por supuesto que no lo es! Hacer una pausa y notar ayuda a reconocer el hecho de que nuestro cuerpo, nuestros pensamientos, nuestras emociones y nuestros intereses están cambiando, no han permanecido iguales a lo largo de nuestras vidas. Además, el mundo que nos rodea está en un continuo proceso de transformación. Estamos inmersos en un océano de cambios constantes que ocurren dentro y fuera de nosotros.

Para algunos de nosotros puede haber una tendencia a querer que algo permanezca fijo, inmutable. Como cuando descubrimos cómo funciona algo. Hay una sensación de logro y una sensación de alivio porque hay una cosa que sabemos. Por lo tanto, puede ser frustrante cuando comenzamos a notar que todo está cambiando.
Sin embargo, la esencia de la vida es el cambio continuo. Reflexionar sobre nuestros recuerdos confirma que todo ha estado cambiando a nuestro alrededor y dentro de nosotros. De hecho, notar este hecho aquí y ahora proporciona la confirmación de que hemos sido capaces de navegar con éxito las corrientes de la vida. Incluso cuando nos hemos sentido confundidos, de alguna manera, hemos sido capaces de resolver nuestra confusión y desorientación. Hemos sido capaces de adaptarnos a las circunstancias cambiantes, a veces con más gracia que otras, pero hemos podido, de lo contrario no estaríamos aquí.

Aunque nos gustaría pretender que somos buenos para predecir, puede ser útil considerar si hubieras podido hacer una predicción precisa sobre tu vida hace seis meses, un año o cinco años. La vida siempre está cambiando de formas impredecibles. Este hecho nos libera de tener que fingir que podemos controlar el mundo fuera de nosotros. También nos confronta con el hecho de que pasaremos por momentos de incomodidad tolerable.

Ojalá alguien me hubiera explicado el proceso de aprendizaje en algún momento. La típica instrucción para aprender era simple, estudia. O concéntrate. Eso fue todo. Soy consciente de que hay muchas personas que son más inteligentes que yo que probablemente tenían suficiente información con esa instrucción para aprender rápidamente. Me tomó décadas reconocer cómo el proceso de aprendizaje funciona realmente para mí, y eso cambió por completo mi enfoque del aprendizaje y me hizo ser un mejor estudiante. El yoga, como práctica de autorreflexión y autocomprensión (svadhyaya), hizo que fuera más fácil notar los patrones en mi proceso de aprendizaje.

La esencia del aprendizaje es la incomodidad tolerable. Comienzas con tu interés y motivación sobre un tema o habilidad específica. Luego tratas de entender y practicar. Lo que desearía que se me hubiera hecho explícito era que el aprendizaje es el proceso de alcanzar los límites de nuestra comprensión. Y ese es un proceso que genera molestias tolerables. No duele, pero puede generar confusión, frustración y tal vez irritación. Estas son señales de que aún no entendemos completamente lo que estamos tratando de hacer. Con una buena orientación y practicando inteligentemente, identificamos la incomodidad tolerable como un paso necesario al ir de no saber a saber. En lugar de ser una señal de que no somos buenos o que somos estúpidos, la incomodidad tolerable que sentimos confirma que estamos explorando los límites de nuestro conocimiento y que estamos al borde del descubrimiento.

Aprender es armar un mapa para navegar nuestra vida. Algunas de nuestras experiencias pasadas están muy claramente documentadas, mientras que otras pueden ser borrosas. Actualmente estamos coloreando en el mapa la etapa de nuestra vida por la que estamos atravesando. Hay partes del mapa que están vacías. Sí, puede ser desconcertante mirar el mapa y no ver ninguna orientación. Aquí es donde un guía o maestro confiable puede ser útil. Por nuestra parte, es valioso identificar la incomodidad tolerable como retroalimentación que indica que estamos aprendiendo. Si, en cambio, vemos la incomodidad del aprendizaje como un signo de fracaso, podemos sentirnos tentados a abandonar el proceso. Cuando experimentamos incomodidad tolerable, podemos usarla para empoderarnos para aprovechar la energía que de otro modo se desperdiciaría en forma de irritación o frustración. ¿Qué sucede cuando vemos la irritación o la frustración como una confirmación de que estamos aprendiendo y una invitación a invertir esa energía en encontrar diferentes opciones en las que no habíamos pensado antes? ¿Podría ser esta una forma muy efectiva de completar una nueva parte del mapa?

En resumen, es importante entender lo que sabemos y cómo lo sabemos, favoreciendo la experiencia directa y el sentido común. Reconocemos que el conocimiento es dinámico, cambia, porque todo está cambiando todo el tiempo. Dado que la vida no se repite, no es posible predecir con precisión, y no tiene sentido tratar de hacerlo. Entonces, en lugar de fingir que nuestro conocimiento ya está completo, es en nuestro propio interés ser realmente buenos en el aprendizaje recordando que todo aprendizaje, por definición, nos ayudará a trascender nuestros puntos de vista y comprensión actuales, y, por lo tanto, en el proceso nos sentiremos incómodos. Cuanto mejor manejemos esta incomodidad, más efectivo será nuestro aprendizaje y más probable será que continuemos aprendiendo por el resto de nuestras vidas.

Cuando entendemos el proceso de aprendizaje, es mucho más fácil pasar de la información al conocimiento, luego al dominio y, finalmente, a la sabiduría.

Esta semana te invito a reflexionar sobre tus experiencias anteriores para descubrir si todo aprendizaje significativo implica una incomodidad tolerable. Entonces presta atención a lo que estás tratando de aprender ahora. ¿Cómo lo haces? ¿Dónde encuentras obstáculos? ¿Qué sientes cuando aún no has tenido éxito? ¿Cuáles son las características de la incomodidad tolerable para ti? ¿Cuáles son las diferencias entre la incomodidad tolerable y el dolor? ¿Puedes usar la energía de la incomodidad tolerable para motivarte a seguir aprendiendo?

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Este es un fragmento del libro Desenreda el hilo: Cómo poner en práctica la antigua sabiduría del yoga para vivir una vida feliz

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